Sin saber,
la tarde se vuelve noche
tan despacio
como el aire brisa,
la luz estrella.
Pierden el perfil las encinas.
Respira fatigada la lechuza,
y repite sin descanso
su nombre el búho,
haciendo eco en la montaña.
Dos luceros brillan a ras de suelo:
el gato busca compañía.
Ladra el perro sin motivo aparente,
¿Será a la ronda del raposo,
o al paso rápido del jabato?
El cielo se cubre de estrellas.
Luce casi blanco
el “Camino de Santiago”,
recordando a los romeros
que pueden continuar la ruta.
El silencio se hace grande,
la noche viene tranquila.
Descansan los cuerpos
se calma el espíritu.
Llega la noche a Pacanda.
Fotografía: Anochecer en Piedra ( Llanes ).
Me ha gustado muchísimo el texto, la foto menos. No se nos ve a ninguno de los que estábamos al pié de los árboles, al que menos a Áyobe.
ResponderEliminarUn abrazo y un poquito de flash.
Rafa
Gracias Rafa por estar siempre ahí, animando con tus comenatrios. Ya me gustaría que Áyobe saliese en la foto.
ResponderEliminarExpresiones
Piedra
Hola:
ResponderEliminarRafa me avisó de que había entradas nuevas en el blog. La verdad es que hacía ya algún tiempo que no entraba.
Pues a mí si me gusta la foto. Con gente seguro que se estropea, sobre todo con alguno :-)
Pi