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En todo Llanes se puede hacer
la ruta costera por sendas y veredas; sendas muy bien acondicionadas y veredas
abiertas al paso por pescadores y visitantes.
Es imposible, en una entrada
al blog, presentar tanta belleza como atesora
la costa llanisca. He querido mostrar detalles de tres rincones: la senda de
Poo a San Martín, la península del Borizo, y la Canalona.
La costa acantilada, en las
calizas de la formación Picos de Europa, ofrece un relieve cárstico
impresionante, con infinidad de calas, ensenadas, puntas, castros
(pequeños islotes) y playas de ensueño, sin mencionar los bufones, (http://miguelbueno.blogspot.com.es/2012/03/bufones-de-llanes.html
) que ya hemos conocido en este blog.
Si la mar en momentos de
galerna es todo un espectáculo, cuando está en calma, su belleza tranquila es
un reposo para el caminante. Animo a los visitantes de Llanes, a por lo menos
dar un corto paseo por la senda costera, esta abierta a todas las edades y
seguro que les deja un buen sabor.
He costeado por 'caminos de ronda' parte de la costa brava pero este reportaje que nos muestras Miguel es increíble. Tienes mucha suerte de vivir en un lugar privilegiado.
ResponderEliminarUna maravilla.
Un abrazo
Espectacular belleza la de la costa oriental asturiana. Incomparable. Muy bien reflejada en estas fotos tan bellas.
ResponderEliminarWow, pero qué preciosidad!! ¿para qué irse a Irlanda?
ResponderEliminarEspectaculares fotos, Miguel. Espectacular belleza la que posee esa costa, una delicia. El contraste que ofrece la primera del verde y el azul, me ha dejado cautivada, pero según iba descendiendo por las sucesivas..., qué decirte, no sabría con cuál quedarme.
ResponderEliminarNo se puede hacer mejor presentación de un lugar que este reportaje.
Abrazos de mar, Miguel.
El agua es luz, la costa es vida y muerte por igual...
ResponderEliminarSaludos y feliz domingo.
Magnífico tu reportaje sobre llanes y preciosas, como siempre, tus fotografias, obtenidas, desde luego, en un dia de calma en el Cantábrico, cosa poco frecuente.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Todas las fotos del reportaje son estupendas pero la primera me encanta. Esa casi isla con el mar a los dos lados del itsmo que forma la playa es espectacular. Como dice Francesca ¿para qué irse a Irlanda? Bueno, entre otras cosas para ver la Calzada de los Gigantes y más, pero tiene razón.
ResponderEliminarSalu2
Cuanta belleza nos acercas a través de tu "objetivo", para nuestro deleite.
ResponderEliminarUn abrazo y buena semana.
Ramón