Riucaliente es un barrio de la parroquia de Ardisana con 101
vecinos, 43 familias, 79 viviendas y 21
hórreos.
La aldea tiene el mayor conjuntos de hórreos de todo el
Oriente asturiano, algunos bien conservados y muchos que necesitan una mano
carpintera urgente.
Recomendamos subir a la zona más elevada del pueblo para ver
la gran ¿panera?, sobre una enorme torre. Aunque existen algunos hórreos y
paneras sobre viviendas, esta es tan espectacular, que bien merece la visita
por si sola.
El pueblo, aunque tiene algunas buenas casas y otras
restauradas para alquilar en la temporada veraniega, da la impresión de camino
sin retorno que presentan muchos pueblos del campo asturiano.
El bar, esperando que llegue el turista a tomar un culín de
sidra o un quinto de cerveza, y las casas de alquiler con su cartel de “se
vende”. No se pueden mantener todo el año para alquilar solo el mes de
vacaciones.
Vimos a la única niña que volvía del colegio en Posada. Muy
poco para poder sustituir a los 100 vecinos en un mañana muy cercano.
En todos los lugares la misma historia, los productos del
campo nos se venden a nada. Las pomaradas se pierden. El precio de la manzana
no costea ni su recogida. Se trae de los países del Este para poder fabricar la
sidra.
No queda ni una sola
vaca lechera, la lecha se paga más barata que el agua.
Los corderos se crían para autoconsumo, nadie te compra uno.
Solo queda la vaca Casina para carne, que al estar aún
subvencionada para mantener la cabaña
como raza autóctona, se puede criar. Su número ha aumentado tanto que nos
tememos que la subvención para mantenerla se acabe muy pronto y queden los
ganaderos colgados del cielo, como les ocurrió con las lecheras.
Riucaliente tiene la estatua de “la castañera” de la ruta
del Camin Encantau, una ruta senderista por el valle de Ardisana de gran éxito,
con un recorrido de 10 Km. que se puede realizar cómodamente en tres hora y por
lo menos en la temporada turística tiene algo de vida.
La visita la realizamos con nuestra amiga Ana Gutierrez,
gran luchadora desde la asociación de vecinos de Celorio ¨La Hoguera”,
reivindicando mejoras para sus convecinos. Desde esta página la queremos
animar después de los salvajes hechos que ha sufrido recientemente.
Pacanda, junio 2017
Piedra
Qué lugar tan paradisíaco, Piedra.
ResponderEliminarSi dan ganas de coger las maderas y volverlas a restaurar todas.
Seguro que sería todo un éxito.
Pero si el poderoso caballero que todo lo arregla no aparece, habrá que resignarse.
Es un lugar envidiable.
Y todo el entorno una maravilla: el río, los prados, la montaña, los árboles. Vimos un nispero con frutos como manzanas de grande, increible.
ResponderEliminarExpresiones, Soco
Piedra
Un precioso reportaje el que has plasmado en tu blog.
ResponderEliminarPasear por Riocaliente, y escudriñar por sus rincones, fisgar sus árboles, los frutos.... visitar la castañera.... la multitud de Hórreos que hay y sus flores... en vuestra compañía, es todo un planazo... aunque amenace tormenta.
Además has dibujado el pasado y el futuro de estos pueblos, que como algún "bienpensante", no planifique urgentemente algo para ellos, veremos cada vez más diezmados.
Un beso y Muchas gracias!!!!! Ana
ResponderEliminarHola Miguel, precioso reportaje de Riucaliente. Hace unos seis años que no voy por allí, y debo de hacerlo pronto viendo lo que nos muestras. Las imágenes dicen que las maderas de algunos de esos hórreos tienen cuatro siglos, cuatro siglos viendo y oyendo historias de gentes que se fueron y regresaron y otras permanecieron esperando siempre las mejores noticias. Felicidades.
Gracias Ana, fue un paseo maravilloso a pesar de mis achaques.
ResponderEliminarEra incleible tanta belleza reunida, que ni por asomo se refleja en el blog.
Tenemos que repetir el valle de Ardisana.
Abrazos y expresiones
Piedra
Gracias amigo Paulino. Será un disfrute volver a Riucaliente de tu mano y que nos vayas explicando todo lo que sabes sobre los hórreos.
ResponderEliminarTe esperamos.
Abrazos y expresiones
Piedra
Un paisaje precioso ... lástima que nadie se acuerde de estos lugares... nadie de los que tendrían que procurar por su mantenimiento...una lástima, cantidad de pueblos pequeños están en una situación similar ..
ResponderEliminarUn abrazo
·.
ResponderEliminarLas fotografías, elocuentes, a la par que excelentes, cantando la belleza del lugar y de esa impresionante colección de hórreos.
Es una lástima ese abandono del mundo rural en aras de una civilización que solo porta uniformidad.
Haces un gran trabajo, Miguel.
abrazos MyM
y hasta mi regreso de mi habitual descanso veraniego.
· LMA · & · CR ·