28 marzo 2016

In memoriam de Miguel Hernández





Mañanas de primavera

Silencio

Nadie cante tus versos

De hambre y cebolla

De los amigos del alma

Aceituneros altivos

Yunteros los niños

De sudor y olivo

Carne de yugo

Toro de España

Alza la negra espuma

Despierta, levanta

La muerte no es muerte

Si tu voz retumba

Por sierras y campos

Entre estrellas y luceros

Vientos del pueblo

Te llevan muy cerca

Por los páramos de las Españas

Asturianos de braveza

Andaluces de relámpagos

Gallegos de lluvia y calma

Gritad conmigo

Miguel, Miguel

Que nuestra voz suba  a los montes

Baje a la tierra y truene

Ahora y siempre.


Miguel Bueno

19 marzo 2016

Soledad de dos y el mar

 
 
Esta tarde encontré esta maravilla cuando caminaba por los acantilados.
No había nadie, en kilómetros a la redonda, y allí estaban ellos. En la soledad tan grande de los dos juntos, frente a la mar.
Y si fuera poco, el quita vientos de colores a rayas, por si un causal, le da por llegar al “gallego”.
Imagínate sentarnos juntos, a mirar el mar, mientras vamos recordando la vida, nuestra vida vivida:
Aquella tarde cuando tuve tus manos entre las mías.
La mañana en que me entregaste el primer beso. ¿No recuerdas?
Aquel día en la playa, jugando a correr por la arena. Nos caímos y no podíamos levantarnos de tanta dicha.
Y los días de mar en calma, cuando no nos cansábamos de nadar, hasta perder de vista la orilla.
Otros días de recorrer de playa en playa, con toda la pandilla, desde el Chorrillo a Burriana, entre tajos, sorteando las olas.
Tantas tardes sentados en el Bacón de Europa, mirando la mar, ajenos al ir y venir de la gente. Contando historias sin fin.
El día, cuando el cura nos echó de la iglesia y fuimos tan felices. ¡Qué liberación de tantas falsas ataduras!
Y ahora tanta dicha de mirar la mar, sin prisa, con toda la calma y todo el tiempo para nosotros. En esta inmensa soledad de los dos juntos, y el mar.
Un nuevo mar que ahora nos acoge sin pedir nada a cambio y nos deja contarle nuestra vida por vivir.
Miguel Bueno.

14 marzo 2016

Amor. Amour. Love








Tú y Yo. El tiempo que fue, aún nos pertenece. ¡Qué delicia! Vivir lo vivido y seguir mirando tu rostro cuando duermes; seguro que sueñas con las horas sin fin, de aquél tiempo en que fuimos uno, tú y yo. Los dos perdidos en aquel segundo infinito del primer encuentro. Amor

Toi et moi. Le temp qui était, c'est encore à nous. S'est Génial ! Vivre ce que on a vécu et regarder ton visage quand tu dors. Je suis sûre que tu rêves de les heures sans fin, de ce temp où nous étions jusque un, toi et moi.
Les deux perdus dans le second infini de notre premier rende vous. Amour.


You and me, the time that was, is still ours. So nice ! Living the lived and continuing looking your face when you sleep. I am sure you are dreaming that hours without end, at that time wen we were just one, you and me. The two of us lost in that infinite second of the first encounter. Love

Miguel Bueno